Se recuerda que Pablo Gonzalez Tavarez, alias "La Chuleta" de 58 años de edad y residente en el bario La Pulga del populoso sector, el cual fue apresado mediante la orden de arresto número 3121-2018, dijo que contrató a dos ciudadanos haitianos solo conocidos como los tales Wily y "El Cojo", para que junto a él se trasladaran hacia la comunidad de Los Ciruelos de la carretera Baitoa, ya que había sido enterado de que en esa comunidad se encontraba un campamento de vehículos a los cuales dispusieron robarle las baterías.
De acuerdo al relato hecho a la policía por parte del conductor de carro publico detenido, unos tres días antes, a eso de las dos de la mañana, se presentaron al lugar con las luces del vehículo apagadas, pero que tuvieron que marcharse ante los ladridos de un perro, pero que luego regresaron con salami y veneno del denominado "tres pasitos", el cual le dieron a ingerir al animal.
Manifestó que la noche del hecho, para acercarse a los vehículos estacionados en el lugar, primero entro unos de los ciudadanos haitianos que le acompañaba a pies para no ser visto por el vigilante Rafael Antonio Beato (La Belleza), apostado en ese sitio, quien al tratar de evitar el robo fue ultimado por los malhechores quienes tan pronto cometieron el hecho emprendieron la huida. Genaro Martinez, propietario de un negocio de compra y venta de baterías, el cual fue la persona que recibió las baterías de manos de los autores del hecho criminal.
Durante las investigaciones en torno al caso, la Policía y el Ministerio Público realizaron múltiples allanamientos donde detuvieron a siete personas y recuperaron varias baterías que fueron sustraídas durante el delito en el que ultimaron al vigilante.
Sin embargo, mediante una labor de inteligencia e investigación la Policía logró identificar a los autores del hecho procediendo arrestar en el sector de Cienfuegos a nombrado "Chuleta.
