Por: Waldy Genao baitoaTV.com 14 julio 2017
Ahora bien, no podemos vendernos como patrióticos y/o defensores de ninguna soberanía cuando nuestras luchas las centramos en contra de los inmigrantes de una sola nacionalidad, en nuestro caso la haitiana.
Y yo me pregunto; ¿Por qué es tan fácil entender la situación por la pasa nuestra hermana nación de Venezuela, y aceptamos sin problemas su migración ilegal y no pasa lo mismo con los haitianos, quienes son el país más pobre del hemisferio? ¿Por qué si el tema de los haitianos se discute sobre las bases de la economía del país, no sucede lo mismo cuando se trata de los chinos que han hecho imperios comerciales desplazando a pequeños y medianos empresarios d
Con esto no pretendo defender el descontrol que existe en nuestras fronteras, es un gran problema que debe ser solucionado de manera rápida, lo que pretendo es defender la naturaleza humana de moverse en busca de satisfacer sus necesidades. Esto es lo que sucede en todo el mundo, habitantes de países pobres se mueven hacia países de mayores riquezas en busca de mejoras. Todos tenemos un familiar que emigrado hacia otro país ¿Podríamos preguntar qué le motivo a dejar su patria?
Otro punto es la doble moral que podemos encontrar en quienes se afanan en siempre opinar sobre el tema, en donde no solo ignoran el tema de los chinos, venezolanos y otros, sino que también se muestran en contra de las políticas migratorias que ejerce el gobierno norte americano en contra de la inmigración ilegal en ese gran país. ¿Por qué los gringos sí deben ser considerados con sus inmigrantes y en cambio los dominicanos debemos pisotearlos sin piedad? ¿Cómo exigimos que a los inmigrantes en EE.UU se les respeten sus derechos, cuando en nuestro a país decimo que los haitianos no merecen ningún respeto porque están ilegales? la respuesta es que aquí somos nosotros los que pisoteamos, sin embargo allá; somos los pisoteado.
Cuando somos nacionalista selectivo no estamos siendo patriota y mucho menos defendemos de nuestra soberanía, lo que mostramos es el racismo que fue sembrado por Trujillo, continuado como escalafón político por el Dr. Balaguer y en este siglo por otros que también pretenden beneficiarse políticamente; silenciando temas importantes y tratando de vender un falso nacionalismo que solo existe hacia los haitianos, pero que no se expresa cuando se trata de defender los recursos públicos saqueado corruptos y compañías como ODEBRECHT, BARRICK GOLD Y OTRAS.