O para decirlo de otra manera, algo positivo está pasándole a la mayoría de los ciudadanos del mundo gracias a la notable caída de los precios del petróleo.
Un importante precio indicativo, el crudo Brent, cayó otro 1,7% este lunes hasta alcanzar los US$68,4 por barril, lo que significa que el precio es ahora 40% menor que cuando alcanzó su punto máximo el pasado mes de junio.
El precio del West Texas también descendió a US$65, una cifra que no habíamos visto desde mediados de julio de 2009, cuando el mundo fue golpeado por la peor crisis económica registrada desde la década de 1930.