Dentro de cuatro días, el próximo domingo, se celebrarán las elecciones presidenciales de República Dominicana.
Es habitual que quienes escriben editoriales y artículos de opinión hagan unas sugerencias finales antes de esa clase de eventos, en especial, si se han referido reiteradamente a los episodios relacionados.
A mí no se me ocurre sugerencia alguna sobre qué hacer. Tengo entendido que todos los participantes son mayores de edad y me parece que a esta altura del juego, sería bueno que quien crea tener algún tipo de discernimiento, lo utilice.
Burlándose –frecuentemente con sobrada razón de las burradas de Hipólito- los peledeístas no han reparando en la clase de orejas, rabos y pezuñas, que les han crecido a ellos.