Por: Rafael Peña.
Siento como una obligación el expresar mi gran alegría al ver que existe el deseo de reconstruir la sociedad baitoera "Club Union Y Progreso".
Quiero decirles a todos los baitoeros que aniden en su corazón el entusiasmo por revivir nuestro club, que algún día, quizás no lejano, se darán cuenta de la importancia que para nuestra comunidad y su historia tiene la reconstrucción de una institución social, que sin sentir el mas mínimo temor a equivocarme, les digo fue siempre la máxima representación de nuestra grandeza.
A cada uno de los que comparten la idea de esa gran obra, quiero hacer llegar mi más decidida solidaridad con la misma.
No puedo permitir desperdiciar esta oportunidad para sugerir algo en base a experiencias del pasado, ya que fui presidente del club hace más de 25 años. Empecemos esta histórica obra, de una manera organizada, no nos enfoquemos dando prioridad a la solución física del local. Ese desastre en que se encuentra el local no es más que el producto de la desaparición de la esencia del club. Arreglando el piso o la pared, en nada asegura que arreglamos la sociedad. En cambio, si devolvemos vida al club, el arreglo del local seria un melao.
Ojala mis palabras sean asimiladas con el mismo valor de buena fe con que las expreso.
Un fuerte abrazo y siempre con la bandera de nuestra comunidad bien en alto. Recordemos: BAITOA ES DE TODOS
