Por: Rafael Pena y Rubén Díaz
www.baitoaprimero.com
Cuando a finales del año 1966 llegue a Corona, Queens, experimente las primeras y naturales sensaciones de inseguridad al enfrentarme al inicio de una nueva vida en un país desconocido. Para ese entonces, Corona, situado al este de Manhattan era ya un populoso sector, habitado por muchos dominicanos, con una basta representación de Sabana Iglesia.
Una mañana de diciembre del ya citado año, comencé a orientarme en cuanto al físico de Corona, conociendo sus principales arterias. Fue así como descubrí que en las esquinas de la avenida 37 y calle 102 estaba situado el pequeño local de mí entonces Partido Revolucionario Dominicano (P.R.D.) En realidad, esa fue una muy agradable experiencia porque me animó en el sentido de ya tener gente que aunque nuevas para mi, compartíamos el mismo pensamiento partidario.
Fue en función de mi incorporación a los trabajos del partido que empecé a conocer y tratar a personas de la popular comunidad. Había una bodega (Deli) localizada entre las calles 102 y 103 y en la avenida 37, es decir a pocos pasos del local zonal del PRD.
Soilo Díaz, su propietario, fue mi primer contacto, luego sus hermanos en especial Octavio (Tavo), a quien visité en Sabana Iglesia en varias ocasiones después de su retiro de Nueva York
Mientras pasaba el tiempo, fue creciendo el número de personas de Sabana Iglesia que yo conseguía incorporar a mi núcleo de amigos. Dante Díaz (que en paz descanse), y sus hermanos Nelson; Rafael (tremendo guitarrista) y otro también muy especial Herminio (gigante ser humano). Debo decir que necesitaría mucho, pero mucho tiempo y espacio para citar todos mis amigos de Sabana Iglesia de aquellos años. con los que hasta ahora he mencionado, solo pretendo expresar mis sentimientos de afectos y agradecimiento a todo el pueblo de Sabana Iglesia por su histórica calidad humana, por su fraternal convivencia con mi paria chica Baitoa y a esos entrañables amigos de hace más de 40 años de Corona, gracias por hacer posible el título de este articulo.
Rafael , yo también me siento como si fuera de Sabana Iglesias, desde mediado de los años ochenta hice vida haya, con los intercambios deportivos, recuerdo que al menos una ves por semana, íbamos caminando a jugar a Sabana Iglesias cerca de 15 muchachos de mi generación, hice amistades muy buenas y también conquiste a mi esposa, que es de Sabana Iglesias. También viví dos años haya, y fortalecí mis vínculos amistosos, no olvido a esos amigos de esos años y que siempre que voy allá trato de buscar, mis amigos, Víctor Núñez, Gilberto Almonte, Carlos Williams, El Zuro, Chelo, entre otros. Son muchos amigos y muchos recuerdos maravillosos que llevo dentro de mi, por Sabana Iglesias...
Rafael , yo también me siento como si fuera de Sabana Iglesias, desde mediado de los años ochenta hice vida haya, con los intercambios deportivos, recuerdo que al menos una ves por semana, íbamos caminando a jugar a Sabana Iglesias cerca de 15 muchachos de mi generación, hice amistades muy buenas y también conquiste a mi esposa, que es de Sabana Iglesias. También viví dos años haya, y fortalecí mis vínculos amistosos, no olvido a esos amigos de esos años y que siempre que voy allá trato de buscar, mis amigos, Víctor Núñez, Gilberto Almonte, Carlos Williams, El Zuro, Chelo, entre otros. Son muchos amigos y muchos recuerdos maravillosos que llevo dentro de mi, por Sabana Iglesias...
