Los restos fueron llevados al Club Unión y Progreso de Baitoa, para que los moradores de la comunidad le dieran el último adiós a la joven, que en los últimos días se constituyó el principal tema de conversación de las familias Baitoeras; gracias a una jornada maratónica que buscaba preservar la vida de la joven madre, después de estar en estado de coma por más de 15 días en el hospital de esta cuidad de Santiago.
En el club se celebró un culto de oración y despedida, que desgarro el alma a todos los presentes, entre los que se encontraban líderes comunitarios, los estudiantes del liceo Gabriel Franco y la comunidad en sentido general.
Paz a sus restos, de parte de la familia de baitoaTV.com y de pueblo de Baitoa en sentido general.
Fotos/CHEGUI